Traducido por Máximo Castro
PHILIPSBURG, Sint Maarten.- No recuerdo un momento en que la relación entre estas dos entidades no haya sido tensa. Sí, hemos tenido pausas, pero las corrientes subyacentes siempre han estado presentes. Recuerdo los primeros años que siguieron al referéndum constitucional de 2000, cuando la posición del gobierno del Reino “no era un estado separado (leer: país)” para ninguna entidad en el Reino. ¡Usted estaba dentro o fuera!
10 años después de nuestro referéndum, los partidos habían logrado salir de ese dilema a la cautelosa satisfacción de los partidos, al parecer. No obstante, quedaron algunos problemas espinosos, no en el último lugar que ocupan las posiciones contrarias de ambos lados del océano en lo que se refiere al artículo contencioso 43 de la Carta.
La reciente enmienda a la Carta, mientras que un paso en la dirección correcta, no mitiga totalmente el déficit democrático, que sigue siendo una espina en la relación.
Un avance rápido hasta el día de hoy y no queriendo rehacer toda la historia con respecto a la Cámara de Integridad, vamos a establecer al menos lo siguiente:
El GOBIERNO de St. Maarten presentó un proyecto de ley con respecto a la Cámara de Integridad.
El PARLAMENTO de St. Maarten recibió el proyecto de ley y lo aprobó.
La CORTE CONSTITUCIONAL de San Maarten rechazó la ordenanza (ley).
EL GOBIERNO de St. Maarten siguió con el Protocolo acordado del 24 de mayo de 2015.
El GOBIERNO DEL REINO se retiró (esto parece) del proceso.
El GOBIERNO de St. Maarten continuó a su ritmo y en base a sus prioridades en el área de integridad.
Justo antes de las elecciones holandesas, el gobierno del Reino se puso de nuevo en marcha y unilateralmente reinició el proceso, que había abandonado siguiendo el protocolo firmado de 2015.
¿Quién está en su derecho? ¿Quién se aferró a la ganga?
Estas dos preguntas en las últimas semanas no han sido resueltas por lo menos a la satisfacción y el acuerdo de todos. Dentro de la constelación actual, no veo una solución amistosa a las cuestiones fundamentales de esta relación y seguramente no en un futuro próximo.
Pisan nuestros talones en este momento, mientras que al mismo tiempo saben que no estaremos fuera de esta relación “mañana”, no sirve a nadie. Puedo pensar en el efecto que tendrá esta “excavación” en el área de salud (hospital), financiamiento de bajo interés, cooperación (vertedero), riesgo de riesgo, prisión y varias otras áreas, cooperación de las islas de barlovento etc.
Así que en lugar de cavar, vamos a restablecer. De acuerdo a un punto, donde al menos estábamos en la misma página y trabajar hacia adelante, respetando la autonomía de en este caso, St. Maarten.
Espero y oro para que el gobierno provisional del Reino (leído: los Países Bajos) respetará esto y avanzará cautelosamente, permitiendo un cierto tiempo para reajustar esto.